En esta ocasión, Ingrid Cebada, becaria de la Fundación para las Letras Mexicanas en el área de dramaturgia nos comparte algunos fragmentos de su obra Resfeber. “La aventaron… aventaron su maleta y luego la aventaron a ella… No pude, no puedo hacer nada, no sabía que eso iba a pasar, no tenía idea. Fue un horror. Me mata la idea de pensar que eso pudo haber pasado contigo porque sé que estás o estuviste aquí, no entiendo cómo encontraste este lugar o quién te trajo.”