Contenido elaborado en colaboración con Grupo Bimbo

Es por todos conocido que el consumo y la producción mundiales (fuerzas impulsoras de la economía) dependen del uso de bienes que nos provee la tierra, siendo el campo uno de los sectores con mayores retos para enfrentar esta tarea de manera sostenible, lo que en términos prácticos se traduce en hacer más con menos.

Una forma de producir alimentos en armonía con la naturaleza la ofrece la agricultura regenerativa. Esta práctica agrícola procura la salud del suelo, lo regenera y revitaliza, perseverando así su fertilidad para el futuro. Este tipo de agricultura busca mantener la productividad del suelo a largo plazo y evita la expansión de sembradíos en nuevas áreas. La prioridad en la agricultura regenerativa es la sostenibilidad ambiental y la salud humana. 

La agricultura es fundamental de cara al futuro, pues es gracias a ella que se logra la seguridad alimentaria; ante este panorama es que Grupo Bimbo, la panificadora más grande del mundo, en colaboración con el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), apoya a pequeños productores de maíz y trigo a través de un proyecto piloto, para que adopten prácticas de agricultura regenerativa en el campo mexicano. Los proyectos con los que Grupo Bimbo promueve la agricultura regenerativa son Maíz Sustentable y Trigo Sustentable, en los cuales además del CIMMYT, también se ha sumado Cargill como socio estratégico y cuentan con el respaldo de un convenio firmado en 2017.

Esta colaboración ha garantizado mejores prácticas agrícolas que estimulan el potencial productivo de estos cultivos, fortalecen al sector agrícola de México y promueven el cuidado de los recursos naturales.

Mediante la misma, hasta la fecha se ha aportado a los productores capacitación y acompañamiento para cultivar de manera sustentable sus tierras, logrando así reducir el uso de agua para riego, disminuir o eliminar trabajos mecánicos al sueño (labranza) e implementar un manejo integrado de plagas, enfermedades y malezas, fortaleciendo así la cadena de valor, la cual ha producido hasta la fecha más de 60 mil toneladas de maíz y trigo sustentable, en 41 municipios de Hidalgo, Jalisco, Sinaloa y Sonora a través de 940 agricultores que labran más de 14,800 hectáreas.

De esta manera, mediante la implementación de estas prácticas, no solo se logra mejorar la salud del suelo, sino se contribuye a que los productores puedan tener una mayor competitividad y rentabilidad.

Además de los proyectos de maíz y trigo sustentables, Grupo Bimbo impulsa iniciativas en favor de productores de papa, leche de cabra y cacao, impactando positivamente la economía local. Ejemplo de ello es la certificación internacional de buenas prácticas agrícolas de Global GAP (Good Agricultural Practices) que este año tendrán ya todos los proveedores de papa de Grupo Bimbo. Por otro lado, la empresa busca darle certeza de compra a 350 productores de leche de cabra donde se incluyen también programas especiales que desarrolla con gobiernos estatales. El objetivo es que los pequeños productores puedan incorporarse a la cadena de valor mientras se mejora la genética de sus cabras, incrementan el número de animales para ordeña y se mejora la infraestructura con la que cuentan, lo que lleva a que tengan una producción de mayor cantidad y calidad, al trabajar bajo un esquema estabulado. En lo que respecta al cacao criollo mexicano, la compañía garantiza a los agricultores la compra y productividad de sus cosechas. 

En conjunto, estas iniciativas ya han beneficiado a 1,300 pequeños productores del país. Acciones como esta reafirman el compromiso de Grupo Bimbo para cumplir su Política de Agricultura Sustentable y colaborar al mismo tiempo con el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.EP

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