Arrullo Quise decirte algo cargado de sentido pero terminé por callar. El contento ahuyenta las palabras mientras el mundo resplandece. Qué otra aspiración pudiera encontrarse sino la de recorrer el camino de la soledad al compás de un arrullo cómplice. Abril Tras la ventana la cigarra redobla su barullo en voz intensa: promete un día […]
Poemas
Arrullo Quise decirte algo cargado de sentido pero terminé por callar. El contento ahuyenta las palabras mientras el mundo resplandece. Qué otra aspiración pudiera encontrarse sino la de recorrer el camino de la soledad al compás de un arrullo cómplice. Abril Tras la ventana la cigarra redobla su barullo en voz intensa: promete un día […]
Texto de Claudio Isaac 18/06/17
Arrullo
Quise decirte algo cargado de sentido
pero terminé por callar.
El contento ahuyenta las palabras
mientras el mundo resplandece.
Qué otra aspiración pudiera encontrarse
sino la de recorrer el camino de la soledad
al compás de un arrullo cómplice.
Abril
Tras la ventana
la cigarra redobla su barullo
en voz intensa:
promete un día con el sol
a plomo.
Tarde de junio
Una nube henchida de gris
se refleja en el charco:
pronto volverá a llover.
Vigilado por ella
No despiertas solo.
Domas el sobresalto
y de reojo adviertes
que tu acompañante
se mueve en silencio
con gracia ligera.
Ofrece calidez
pero no deja
de hacerte saber
su fiero abolengo:
puede despedazarte cuando le venga en gana,
comerse tu corazón ahora mismo.
No te distraigas.
No se trata de una bestia
o un espectro turbio.
Tampoco es una mujer remota.
Has despertado en tu cuarto
vigilado por ella
y sabes por fin
que la vida devora.
Santa Cecilia Tepetlapa
Bajo los pinos espigados
las tumbas
que todavía lucen
listones y flores,
ornamentos marchitos de una fiesta pasada.
El aire espeso y templado
es una cortina de silencio
que sólo será desgarrado
por el paso de las ovejas
cuando en procesión bajen del monte.
Dos poemas
a Elva Macías
1. Apunte
Guía, alimenta, escucha, aconseja,
abre los brazos y arropa,
madretierra que no deja de ser párvula
con su media sonrisa de retozo.
2. En su cocina
Apenas con la punta de dos dedos
entreabre el especiero
no para extraer una pizca
de salvia o estragón
sino para dejar que el aroma
se libere y sugiera,
que se filtre en silencio
e impregne el guiso,
el aire, la vida
y que el momento
jamás vuelva a ser el mismo. ~
________
Escritor, artista plástico y cineasta, CLAUDIO ISAAC es autor de Alma húmeda, Otro enero, Luis Buñuel: A mediodía, Cenizas de mi padre y Regreso al sueño. Su novela más reciente se titula El tercer deseo (Juan Pablos Editor, 2012). Este año estrena su largometraje documental SIN DIOS Y SIN DIABLO. Jaime Sabines y sus lectores.