A lo largo de su historia, FEMSA ha mantenido su solidez gracias al valor que le da a su capital humano, a su profesionalismo y a su capacidad de resiliencia tras momentos adversos.
FEMSA: 130 años en el mercado
A lo largo de su historia, FEMSA ha mantenido su solidez gracias al valor que le da a su capital humano, a su profesionalismo y a su capacidad de resiliencia tras momentos adversos.
Texto de Este País 04/11/20
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Este 2020, FEMSA está conmemorando sus 130 años de existencia: su origen se remonta al 8 de noviembre de 1890, fecha en que se constituyó la Fábrica de Hielo y Cerveza Cuauhtémoc. A inicios del siglo XX, la empresa ya estaba consolidada y esto retribuyó en mejoras laborales: servicios médicos gratuitos, facilidades para la construcción de viviendas, reducción de la jornada laboral a 9 horas diarias, la creación de la Escuela Politécnica Cuauhtémoc.
Sin embargo, los conflictos nacionales también se resintieron en Monterrey. En 1914, grupos revolucionarios intervinieron la Cervecería Cuauhtémoc. Para recuperar la fábrica, la junta directiva de entonces diseñó una estrategia basada en el diálogo, en el que argumentaron los beneficios que la empresa generaba al país. A finales de ese mismo año, los revolucionarios la devolvieron a sus legítimos dueños.
En 1918, para promover el desarrollo educativo, económico y cultural del personal y sus familias, se inauguró la Sociedad Cuauhtémoc y FAMOSA. En estos años, la delicada situación económica, social y política en el mundo se agravó con la aparición de la mortal y contagiosísima influenza española. En México, esta enfermedad viral cobró la vida de cerca de 300 mil personas. Ante esta situación adversa, FEMSA y sus compañías filiales fomentaron la cooperación entre sus colaboradores, el trabajo tenaz y el ahorro. Algunas de las medidas que se tomaron para aminorar el impacto de la pandemia entre la plantilla laboral fue la difusión de un estilo de vida sano y la atención médica directa dentro de las instalaciones. Bajo esta filosofía salieron no sólo avante sino también fortalecidos.
A lo largo de sus 130 años de existencia, FEMSA ha afrontado diversas crisis globales y ha superado las adversidades que cada una ha conllevado. Ante la caída de la Bolsa de Valores de Nueva York, en 1929, que generó un desplome económico y que afectó no sólo a Estados Unidos sino también a México, FEMSA tuvo que establecer una política de mesura en sus inversiones. Una década después, el mundo vivió uno de los peores conflictos bélicos que cobró la vida de 55 millones de personas. De 1939 a 1945, la comercialización y el abastecimiento de materias primas se frenó. A falta de insumos extranjeros, la empresa proyectó la creación de sus propias fuentes.
En la década de los 70, pese a las crisis que vivía el país, FEMSA apostó por el incremento de sus inversiones y por la diversificación de los negocios: ingresó en los giros de bebidas carbonatadas y minerales, tiendas de conveniencia, productos lácteos, alimentos enlatados, industria hotelera, servicios bancarios y restaurantes de comida rápida, entre otros.
La nacionalización de la banca en 1982 afectó a Banca Serfin, una de las divisiones de negocios más importantes de FEMSA. Además, el aumento de la deuda en moneda extranjera, llevó a la compañía a un momento muy complicado. Las decisiones de la plantilla directiva, entre ellas la de mantener su personal laboral y capacitarlo para la operación de nuevas tecnologías en el ramo industrial y administrativo, fueron acertadas y a finales de la década de 1980, la recuperación era un hecho.
La crisis económica que azotó al país en 1995 provocó que, en pocos meses, cientos de empresas cerraran. Ante este complicado contexto, FEMSA salió adelante y logró abrir la primera estación OXXO GAS bajo la denominación “OXXO Express”. Tras un periodo de buenos tiempos, en 2008, la crisis inmobiliaria de los Estados Unidos tuvo repercusiones en México: desempleo, devaluación del peso, y una crisis que se agravó con la aparición, durante 2009, de la influenza H1N1. Una vez más, a través del trabajo, el ahorro en sus operaciones, la inversión mesurada y concienzuda, FEMSA no solo realizó nuevas adquisiciones, sino que instituyó la Fundación FEMSA.
La historia de FEMSA es una historia de superación de la adversidad. Es una empresa que ha sabido sobreponerse a los años difíciles y críticos. FEMSA, hoy en día, es miembro del Índice de Sostenibilidad MILA Pacific Alliance del Dow Jones, del FTSE4Good Emerging Index y del IPC Sustentable de la Bolsa Mexicana de Valores, índices que evalúan su desempeño en sostenibilidad.
A través de sus diferentes divisiones (Proximidad, de la que forma parte OXXO; División Salud, farmacias y actividades relacionadas; Combustibles, estaciones de servicio OXXO; Coca-Cola FEMSA, el sector cervecero, Negocios Estratégicos), FEMSA es una empresa que genera valor económico y social, ya que busca ser el mejor empleador y el mejor vecino en las comunidades en las que tiene presencia. EP
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