Susana Chacón, presidente del Centro Tepoztlán Víctor L. Urquidi, traza las líneas generales del proyecto México próspero, equitativo e incluyente. Construyendo futuros 2024-2030.
Texto de Susana Chacón 08/01/24
Susana Chacón, presidente del Centro Tepoztlán Víctor L. Urquidi, traza las líneas generales del proyecto México próspero, equitativo e incluyente. Construyendo futuros 2024-2030.
El Centro Tepoztlán Víctor L. Urquidi A. C., espacio de análisis y discusión independiente y multidisciplinaria de los problemas nacionales y globales desde hace más de cuatro décadas, con el apoyo de El Colegio de México y la revista Este País, decidió emprender en 2023 el proyecto México próspero, equitativo e incluyente. Construyendo futuros 2024-2030, que tiene como objetivo formular propuestas para encarar los grandes desafíos de la nación, a partir del análisis de los problemas actuales con una perspectiva estratégica de mediano y largo plazo. Este ejercicio se hizo, en un primer momento en 2018, bajo la presidencia de Mauricio de Maria y Campos, con el fin de favorecer el cambio de gobierno de hace cinco años y antes de las elecciones de julio de ese año.
El Proyecto se ha nutrido de las sesiones de reflexión y diálogo que cada mes realiza el Centro Tepoztlán, tanto en sus instalaciones en Tepoztlán como en el Colegio de México, con discusiones responsables sobre opciones de trayectorias y propuestas participativas para construir escenarios compartidos de futuro y contribuir al análisis y solución de los problemas nacionales. Más adelante se mencionará la forma en que está dividido el proyecto y sus alcances. En un año electoral, el más importante de la historia de México en el que cambiarán no sólo la presidencia de la República sino más de 20 mil puestos de elección popular, vale la pena hacer un recuento de la situación actual con el fin de hacer propuestas concretas para el gobierno que comienza en 2024.
México vive uno de los dilemas más complejos de su historia reciente.1 La mayoría de la población sufre deterioro de su calidad de vida y la expectativa de un futuro mejor se ve amenazada por la precariedad de las instituciones, la corrupción rampante, la creciente amenaza del crimen organizado y de la inseguridad, el estancamiento y desgaste de la economía, la insuficiencia del bienestar social, la práctica desviada de la política, el desdibujamiento de la presencia internacional, la precariedad en la educación, la carencia de servicios de salud y el deterioro del medio ambiente, entre los más importantes. La situación apunta a la urgencia de transformaciones estructurales que rompan con esta trayectoria y que reencaminen al país hacia un modelo democrático, respetuoso de sus instituciones y del Estado de derecho. Es urgente retomar las propuestas de desarrollo sostenible e incluyente, que abata la pobreza y la desigualdad y traiga prosperidad a la población.
El mundo camina a muy altas velocidades hacia cambios tecnológicos, digitales y de inteligencia artificial y México no se puede quedar atrás. La pandemia de Covid-19 hizo explícita la situación del país en número de muertos y manejo del problema que afectaron, a su vez, los niveles de educación que se alcanzaron en sexenios anteriores. No obstante, es importante reconocer que en estos cinco años el salario mínimo se incrementó en forma muy positiva y que los programas sociales, así como benefician a muchas familias, han sido utilizados como una herramienta electoral a favor del gobierno.
“El país está dividido con graves rupturas en la sociedad ante las que urge la presencia de liderazgos que logren conciliar y no confrontar a los diferentes grupos e intereses”.
La gravedad de los problemas, la creciente militarización de las políticas públicas y los niveles de concentración del poder, han ocasionado una muy baja efectividad de las soluciones en las decisiones tomadas en estos últimos cinco años. El país está dividido con graves rupturas en la sociedad ante las que urge la presencia de liderazgos que logren conciliar y no confrontar a los diferentes grupos e intereses. El cambio tecnológico exponencial al que nos estamos enfrentando, por otra, debe dar lugar hoy a una estrategia diferente, que ataque los problemas de raíz, que impulse el crecimiento, el empleo y el bienestar social, así como la inversión, la creatividad y la innovación y ofrezca resultados palpables a la población en todas las regiones del país en el corto plazo; pero que también impulse soluciones duraderas y sostenibles en el mediano y largo plazos, que permitan recuperar la confianza, el orgullo y la identidad nacional en la arena global. México, al ser parte de América del Norte y del T-MEC, tiene enfrente una gran oportunidad de revertir la precariedad y la difícil situación mencionada líneas arriba si asume los retos que implican el nearshoring como una estrategia para el desarrollo industrial y para el cambio tecnológico pero si y sólo si, se evita quedar como un país maquilador y si se entiende lo que este nuevo modelo representa no sólo para el crecimiento económico y las nuevas inversiones, sino para reducir los niveles de desigualdad y mejorar los de educación que tanto se requieren si queremos transformar al país. Es urgente capacitar y educar a los jóvenes para este cambio tecnológico y para aprovechar las ventajas de nuestra localización.
El entorno mundial es muy preocupante. Hace un año, difícilmente habríamos pensado que en el sistema internacional se tendrían, en forma simultánea, dos graves guerras mundiales: la invasión de Rusia a Ucrania y los ataques de Hamás a Israel. La dificultad para acabar con ambos conflictos en el corto plazo expone al mundo a posibles problemas regionales con consecuencias muy negativas. Por otra parte, se vivirá este 2024 como un año electoral en 47 países. Sin duda el que más nos afecta es el proceso de Estados Unidos. La situación interna entre demócratas y republicanos, la posibilidad de una nueva administración Trump y la debilidad de Biden para su reelección, afectarán directamente a la relación México-Estados Unidos. Se vendrán presiones cada vez mayores por los temas de migración, narcotráfico y en especial por el fentanilo y el número de muertes que ocasiona, pero también por cuestiones comerciales y ambientales. A pesar de las afectaciones, el gobierno mexicano no cambiará su política hacia los estadounidenses en este 2024. México, una vez más y en forma mucho más agresiva, será la piñata de las elecciones en EUA.
El proceso electoral y el inicio de una nueva administración de gobierno representan una nueva oportunidad para construir un mejor país. La difícil coyuntura induce a que la esperanza que se renueva cada seis años, hoy se asiente sobre dos modelos de país opuestos: uno que busca la continuidad de las políticas del gobierno actual y el otro que enfatiza la necesidad de fortalecer la democracia, las instituciones, el estado de derecho y la prosperidad para la población. En este último, la sociedad civil desempeña un papel muy activo en la formulación de propuestas para buscar soluciones tanto en lo económico, lo político, lo internacional y lo social. Buscan reconstruir el tejido social e implantar un sistema de desarrollo sostenible, incluyente y más justo, con mayor confianza en su futuro, precisa de una ciudadanía empoderada y con capacidad de diálogo eficaz con su gobierno.
“El proceso electoral y el inicio de una nueva administración de gobierno representan una nueva oportunidad para construir un mejor país”.
En este primer mes del nuevo año se presentará la propuesta de México próspero, equitativo e incluyente. Construyendo futuros 2024-2030, que el Centro Tepoztlán Víctor L. Urquidi decidió dividir en siete secciones que suman alrededor de 48 subtemas. Además de la coordinación general por parte de la Presidencia del Centro y el apoyo logístico de Nuria de los Ríos, cada sección fue dirigida por uno o dos coordinadores, especialistas en su área. Cada texto cuenta con el esquema de un breve diagnóstico del estado de cada tema, pero lo más importante son las propuestas de acciones concretas para cada uno de los mismos. Los ejes temáticos son:
Cada una de estas secciones tiene importantes subtemas trabajados por especialistas desde diferentes perspectivas. El diálogo y la reflexión en Centro Tepoztlán Víctor L. Urquidi es plural, por lo que no responde a ningún partido político. Reúne a un grupo de expertos nacionales de diversas disciplinas y experiencias de vida, tanto en el sector público como en el privado, interesados en examinar los principales retos políticos y de gobierno, económicos, sociales, tecnológicos, de seguridad y del entorno internacional que afectan a México actualmente. Busca ofrecer propuestas de acciones concretas en las diferentes políticas públicas independientemente de quién quede en el poder. A lo largo de 2024 se harán presentaciones del trabajo ante los más importantes actores políticos, empresariales y de la sociedad civil con el fin de favorecer el desarrollo del país en forma próspera, equitativa e incluyente y con una visión de mediano y largo plazo. EP
DOPSA, S.A. DE C.V
