Con ciencia, FEMSA busca reducir las emisiones de gases efecto invernadero y alcanzar el 100% de energía eléctrica renovable en sus operaciones.
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Ante la necesidad urgente de implementar soluciones para evitar el cambio climático y el calentamiento global, cada vez más empresas están contribuyendo a las metas fijadas en el Acuerdo de París: limitar el calentamiento global a 2°C, por encima de los niveles pre-industriales y realizar esfuerzos para limitar el calentamiento a 1.5 °C.
Conscientes de esta necesidad, Metas Basadas en Ciencia (Science Based Targets Initiative –SBTi–) es una iniciativa mundial que busca que las empresas de todos los sectores establezcan objetivos para reducir las emisiones basadas en ciencia, y así cumplir con el Acuerdo de París. SBTi es una colaboración entre CDP (antes Carbon Disclosure Project), el Instituto de Recursos Mundiales (WRI), el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) y el Pacto Mundial de las Naciones Unidas (UNGC) –todas las siglas tomadas del inglés–.
Hay que mencionar que la iniciativa SBTi ha aprobado las metas de más de 380 compañías globales. En México, la primera empresa (y la tercera en Latinoamérica) en obtener la aprobación de la iniciativa mundial SBTi por sus metas de reducción de Gases Efecto Invernadero (GEI) ha sido Coca-Cola FEMSA, grupo que ha ido cumpliendo los requerimientos para el establecimiento de objetivos en la cadena de valor.
Para lograr estos objetivos, durante 2019, Coca-Cola FEMSA trabajó en colaboración con su cadena de valor para contar con un sólido inventario de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI). Entre las metas que se propuso para el 2030 están la reducción de emisiones absolutas de GEI de sus operaciones en un 50 % y en la cadena de valor en un 20 % (ambas en comparación con el año base 2015); además, busca alcanzar el 100 % de energía eléctrica renovable en sus operaciones.
Cabe señalar que, como parte de su Estrategia de Sostenibilidad, la compañía ha logrado abastecer un 80 % de la electricidad de sus plantas de embotellado con fuentes limpias, ha incrementado su eficiencia energética 1.52 veces de 2010 a 2020 y ha alcanzado una disminución de las emisiones de CO2 de sus plantas de manufactura en un 17.2 % respecto al año 2015.
Aunado a este esfuerzo, Coca-Cola FEMSA promueve el uso de tecnologías limpias para la generación de energía. Actualmente, en Coca-Cola FEMSA han logrado una cobertura de energía limpia en México del 96 % de las necesidades energéticas de las plantas de embotellado, excediendo así el compromiso original al 2020 de utilizar este tipo de energía para al menos el 85 % de las necesidades en el país.
Basados en ciencia, la empresa tiene como meta principal –y en ello enfoca sus acciones– utilizar la energía de la forma más eficiente posible en todas sus actividades: desde el proceso de manufactura de los productos hasta su comercialización. Se debe agregar que, en Argentina, Panamá, Brasil, Colombia, Costa Rica, Guatemala y México, ya se utilizan fuentes de energía limpia en todas las operaciones de Coca-Cola FEMSA.
Ese compromiso, que se extiende por toda la compañía, está enfocado en reducir en el 2030 las emisiones de carbono de su cadena de valor, lo cual refleja el compromiso con una economía baja en carbón.
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