Como cada mes, la reconocida sommelier mexicana Sandra Fernández comparte sus impresiones sobre uno de sus vinos recurrentes del Valle de Jaral de Berrios, en San Felipe, Guanajuato.
Texto de Sandra Fernández Gaytán 19/05/22
Como cada mes, la reconocida sommelier mexicana Sandra Fernández comparte sus impresiones sobre uno de sus vinos recurrentes del Valle de Jaral de Berrios, en San Felipe, Guanajuato.
Hace dos años, en el marco del México Selection by Concours Mondial de Bruxelles, tuve la oportunidad de catar a ciegas este vino como jueza y catadora de dicho encuentro. Recuerdo que en mi mesa con mi grupo de cata fue el tinto mejor rankeado; cuando fue develado nos llevamos una enorme sorpresa.
Este era un vino que prácticamente no conocía nadie, originario de una bodega que apenas comenzaba a presentarse en el mercado. Desde entonces, Pájaro Azul es un vino que procuro, que me gusta mucho y que sorprende.
La bodega se llama Viñedos Pájaro Azul y también es conocida como Guanamé (por Guanajuato, México) y tiene varias etiquetas. Pájaro Azul es el premium de la casa.
Esta bodega está en el rancho de una familia con oficio lechero, la familia Torres; se ubica en el Valle de Jaral de Berrio en San Felipe, Guanajuato. Este vino está dedicado al patriarca de la familia, por visionario, fundador y como homenaje a su trabajo.
El vino es un cabernet sauvignon, malbec, syrah, tempranillo con 12 meses de barricas roble francés y americano. Tiene un color rojo granate, limpio, capa media-alta. En nariz, zarzamoras, ciruela y grosella, cedro; redondo en boca, equilibrado en taninos y acidez. Tiene retrogusto suave y permanencia agradable. La asesora en enología es Laura Zamora.
Aconsejo para maridar con tacos de lechón, carnes, risotto, vegetales asados con mole o chocolate amargo. EP
DOPSA, S.A. DE C.V
