La historiadora Sara Mariana Benitez Sierra nos cuenta el origen de de los juegos de naipes y su evolución con la aparición del “comodín”, figura de gran impacto cultural en los cómics desde el siglo XX y XXI.
El Loco
La historiadora Sara Mariana Benitez Sierra nos cuenta el origen de de los juegos de naipes y su evolución con la aparición del “comodín”, figura de gran impacto cultural en los cómics desde el siglo XX y XXI.
Texto de Sara Mariana Benitez Sierra 15/04/21
I don’t want to be your friend
I just want to be your lover
Usualmente cuando salimos de viaje o vamos a algún lugar con amigos y estamos aburridos se acostumbra jugar baraja. Ya sea 21 BlackJack, Poker, Manotazo, Burro Castigado o un Yo Nunca Nunca que usa las cartas para definir los retos. Y cada vez que alguien la usa para divertirse, tiene en sus manos un cachito de historicidad… Se puede casi sentir entre las yemas de nuestros dedos.
La baraja de acuerdo con la Real Academia Española es un conjunto completo de cartas empleado para juegos de azar; la francesa, con palos como picas, tréboles, rombos y corazones pero con personajes considerados eminentes como Judith, Lahire, Lanzarote, Alejandro Magno, David, Julio César, Raquel, etc; la española, compuesta por los palos de oros, copas, espadas y bastos, y por último, la más popular, la inglesa, formada de cuatro palos de picas, tréboles, rombos y corazones y que suele confundirse a veces con la francesa… pero que se diferencia de la inglesa por sus figuras abstractas que no muestran a personajes como los franceses.
De los juegos de naipes, hay algunas teorías sobre de dónde provienen y una variedad de debates. Se ha hablado de un origen otomano, chino, egipcio, persa, indio e incluso coreano. Los más comunes son el del harén en China y las mujeres que las usaban para no aburrirse, y los mamelucos otomanos que heredaron estos juegos a los europeos o un probable origen proveniente del subcontinente indio.
No matter how it ends
No matter how it starts
Independientemente de esto, hablar de un mazo de cartas nos lleva a Europa, donde tenemos muchas más referencias para decir que por mucho tiempo se ha acostumbrado a jugar naipes hasta que llegaron a América.
Cuando viajamos, y estamos en una tienda de conveniencia es muy normal comprar un juego de cartas. Lo que pocos toman en cuenta al comprar estas es que detrás de este mazo hay todo un trabajo de años con nombres, colores, diseño, emblemas para que no exista falla alguna y que aunque ahora su impresión sea mecanizada, anteriormente, eran elaboradas a mano.
Una de las primeras prohibiciones que recibieron los mazos de cartas fue en 1367 en Suiza. ¿La razón de la prohibición? Promovían imágenes que provocaban la presencia de demonios con las apuestas; además se habían convertido en un recordatorio de los pecados capitales como la ira, la lujuria, la avaricia, la gula, la envidia y la soberbia. Algunas de las colecciones más lindas y que aún se conservan fueron producidas en Alemania y Países Bajos. Aunque actualmente no existen muchos mazos de aquella época porque usualmente fueron utilizados, hasta deshacerse y los pocos que se conservan fueron hechos a modo de encargo y como un artículo “de lujo”.
Forget about your house of cards
And I’ll do mine
Con el paso del tiempo el mazo de cartas también sufrió modificaciones y una importante migración. En Estados Unidos de América se inventó una carta extra; el Jolly Joker, el bromista. Su introducción se dio durante la segunda mitad del siglo XIX. Aunque representa a un personaje de otro periodo histórico; el juglar o bufón.
El juglar solía ser un artista de la Edad Media que deambulaba por dinero o comida a cambio de un buen espectáculo en las calles o avenidas o plazas públicas. El bufón era una persona que hacía reír a los demás, tenía destrezas en malabarismo, acrobacia y otro tipo de juegos su rol para muchos fue fundamental porque comunicaba al vulgo de manera satírica aquellas cosas que supuestamente no comprendían.
Esta figura se convirtió en un personaje forzoso dentro de los juegos de naipes para el siglo XX. En el Tarot, una baraja de naipes que se utiliza mucho en Francia para jugar y que actualmente se relaciona más como un set de adivinación, existe un personaje parecido al comodín; el Loco.
Esta carta representa a un joven con intelecto, sabiduría pero que hace muchas veces las cosas “al ahí se va” y esto es usual en él, pero resulta favorecedor. Esa característica tan importante del arcano representa la incertidumbre de la naturaleza que a su vez tiene sus razones. Es decir, el loco es una figura que puede saltarse los valores morales y promover un comportamiento de “relativa anarquía” y que puede ayudar a la liberación de la energía pero que puede desviarnos y convertirnos en un alma perdida.
Estos valores se encuentran en un personaje tan común hasta nuestros días representado por Cesar Romero, Joaquín Phoenix, Heath Ledger, Jack Nicholson, Jared Leto, entre otros. El personaje presente en el cómic de Batman desde los años cuarenta en DC Comics, es uno de los criminales más importantes de Ciudad Gótica y aunque tiene relación con el mazo de cartas algunos también hablan de su relación con la película El hombre que ríe de 1928 e interpretada por Conrad Veidt, donde aparece un hombre quirúrgicamente desfigurado… Este personaje tiene su origen en la obra literaria de Victor Hugo del mismo nombre que la película quien sufre de las comisuras de los labios y ríe eternamente. El hombre que ríe es miserable en la novela de Victor Hugo y en el cómic de DC; ríe por ser desgraciado pero esa risa es también producto del deseo de que alguien sufra un daño o un mal.
Fall off the table
And get swept under
Ese pequeño bufón que se ríe cuando traviesamente guardamos con celosía el comodín, para ganar en alguno de esos juegos de naipes entre amigos o como cuando esa casa de naipes se derrumba por un viento travieso que nos recuerda lo frágiles que podemos ser… EP